Cuando nos frotamos por instinto el cuello o los hombros, cuando se tiene los músculos adoloridos o tensos, es probable que no sepamos que estamos usando un método ancestral de curación llamado automasaje, ni que sirve para mas que solo aliviar dolores. Entre otros los beneficios del automasaje se reflejan en el sistema nervioso y el sistema circulatorio. Si está sano, un automasaje diario le ayudará a prevenir enfermedades. Si está enfermo puede acelerar el proceso de curación.
La principal ventaja de esta técnica es que se puede combinar con otros métodos de curación para aumentar su efectividad. Si se usa lenta y cuidadosamente, el automasaje relaja el cuerpo y reduce la hinchazón. Si se hace con rapidez, reduce la fatiga y revitaliza el cuerpo. El masaje estimula el flujo sanguíneo, relaja los músculos tensos y alivia el dolor. Además, ayuda a curar lastimaduras, como esguinces, oxigenando el tejido afectado. Dependiendo de la técnica que se aplique, el automasaje relaja o estimula el cuerpo, armoniza el sistema nervioso e infunde a la persona una sensación de bienestar general.
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